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25 poemas aleatorios

 

   Irrealidad

   Thelma Nava

primeros versos

Nada es real el amor está detrás de cualquier puerta (¿pero cuál?) desconocido al que estuve a punto de hallar tantas veces sin conseguirlo. La mitad de mi vida lo he intentado. Nada es real mundo que se construye como una garra del sueño higo inmaduro soledad sola dicha...

 

   Piedra de sol (Fragmento I)

   Octavio Paz - Homenaje

primeros versos

Como un homenaje a Octavio Paz publicamos PIEDRA DE SOL, uno de los más insignes poemas de este escritor universal. Debido a la extensión del texto lo hemos fragmentado, procurando no romper su armonía interior. -------------------------------------------------- un sauce de cristal, un chopo ...

 

   En el sueño de otros

   Lucero Alanís de Gurrola

primeros versos

La casa va callando lentamente en bostezos se reclina al abrigo de lunas con las risas en silencio Sus muros observan mis pasospor el sueño hago mías las horas de otros en sigilo converso con sus hadas y dragonesbajo llave La penumbra en los muebles advierte ...

 

   Pobre flor

   Manuel Acuña

primeros versos

-¿Por que te miro así tan abatida, pobre flor? ¿En donde están las galas de tu vida y el color? Díme, ¿por que tan triste te consumes, dulce bien? ¿Quién?, ¡el delirio devorante y loco de un amor, que me fue consumiendo poco a poco de dolor! Porque amando con toda la ternura de la fe a mi no quiso ...

 

   En su oscuridad la que ama no es oscura...

   Homero Aridjis

primeros versos

En su oscuridad la que ama no es oscura tiene delante de sus ojos la palabra para nombrar lo santo la alegría mueve sus miembros abreva en su corazón y su corazón bebe de ella adentro de su carne la carne es una sola la raíz y el fruto son un botón radiante que el alba enciende...

 

   El juego de los cuatro tiempos

   Homero Aridjis

primeros versos

Creación abrió los ojos y salió el cuervo salió el bisonte salió la luna salió el viento salió la nube salió el árbol salió la nieve etc. salió el hombre salió la estrella salió la planta salió el venado salió la piedra etc. salió el delfín y sigue...

 

   Llego con la cabeza de vigilia...

   Isabel Quiñones

primeros versos

Llego con la cabeza de vigilia, pura luz acosada, trashumante, luz originaria, vegetal, vengo con las manos adelgazadas de nupcial vértigo de mayo, del sueño lustral de la sed mordida, de las constelaciones primeras. Vengo del cristal más fijo de la tierra, de la insumisión irreductible de la llama. ...

 

   Ante un cadaver

   Manuel Acuña

primeros versos

¡Y bien! aqui estás ya... sobre la plancha donde el gran horizonte de la ciencia la extensión de sus límites ensancha. Aqui donde la rígida experiencia viene a dictar las leyes superiores a que está sometida la existencia. Aqui donde derrama sus fulgores ese astro a cuya luz desaparece la distinción ...

 

   Pasas por el abismo de mis tristezas

   Amado Nervo

primeros versos

Pasas por el abismo de mis tristezas como un rayo de luna sobre los mares, ungiendo lo infinito de mis pesares con el nardo y la mina de tus ternezas. Ya tramonta mi vida; la tuya empiezas; mas, salvando del tiempo los valladares, como un rayo de luna sobre los mares pasas por el abismo...

 

   Aldaba

   Oscar Oliva

primeros versos

Anteayer sin tino, hoy cantata de estrofa sanguínea; albardela de potros...

 

   En la ola más alta

   Juan Domingo Argüelles

primeros versos

Solamente la música, la melodía que viene y va como mi boca, ávida, de pezón en pezón, de un monte a la otra cima; solamente la música, tu música, me hace dormir, feliz, mece mi corazón y lo estremece y después lo serena y lo detiene, y lo quema y lo apaga, lo hace ceniza, ...

 

   La música en la edad de hierro

   Alberto Blanco

primeros versos

a Gabriel Macotela Éste no es el viento de los sauces ni el viento de los eucaliptos, ni siquiera el viento que enciende las velas y mueve lentamente los molinos. No es el viento que desplaza las nubes en el calendario del verano ni el viento de la aurora naciendo en las aves. Hermanos, ...

 

   A una dama

   Salvador Díaz Mirón

primeros versos

Bailas por antojo que al mancebo engríe y escotada luces dos hechizos fuera, y en el rubio monte de tu cabellera una flor de grana bruscamente ríe. ¡Pasas, huyes, tornas y el placer deslíe fósforo combusto que te pinta ojera, y tu maridazo mira errar la hoguera y nada barrunta que le contraríe! ...

 

   Canto malabar (fragmentos)

   Elsa Cross

primeros versos

I La tarde entera se vencía al paso del viento. Como arcos se doblaban los árboles y una flecha imprevista me daba al corazón. Deambulé por aquellas calzadas donde tanta vida cimentaron tus pasos. El viento alzaba tolvaneras en medio de los campos, trastornando a esos pájaros rojos, ...

 

   En perseguirme, mundo, qué interesa...

   Sor Juana Inés de la Cruz

primeros versos

Quéjase de la suerte: insinúa su aversión a los vicios y justifica su divertimiento a las Musas ¿En perseguirme, mundo, qué interesas? ¿En qué te ofendo, cuando sólo intentoponer bellezas en mi entendimiento y no mi entendimiento en las bellezas?Yo no estimo tesoros ni riquezas,y así, ...

 

   El halcón

   Alejandro Aura

primeros versos

He causado la ruina de los demás pájaros y las palomas me tienen pavor; he aquí por qué se dice que hay que pensar bien las cosas. Antes de que yo me eligiera fui señalado para el vuelo, no tuve la oportunidad del mamífero ni del reptil ni se me permitió escoger el agua...

 

   La imprevista

   Alí Chumacero

primeros versos

Mírame así, a la frente: deshacías en himnos la apariencia semejante al sueño, y la lujuria en el sudor ardía témpanos de mal, araba en oquedades los remordimientos. Cuando con esa voz de lejanías invocabas los sitios, las costumbres, era tu cabellera la humedad del alma...

 

   Los proscritos

   Jorge Valdés Díaz - Vélez

primeros versos

para Amalia Bautista Lo más original no fue el pecado ni la ira de Dios, ni la serpiente, sino aquella oración que se dijeron al salir al exilio, temblorosos con el sexo cubierto por vergüenza: amor no soy de ti sino el principio . Selección del autor

 

   Algunos se despiden bajo un árbol

   Jorge Valdés Díaz - Vélez

primeros versos

Hoy dejé la ciudad mientras dormía. Sé que no he de volver, y ella lo sabe. Tal vez, pasado el tiempo, todo acabe por ser tan sólo el sueño en donde huía la sombra vertical de un mediodía cuya imagen conservo como un grave ciprés que va a caer. Giré la llave y entonces comenzó la lejanía ...

 

   Sólo un rumor

   Julio César Aguilar

primeros versos

Ven, aún es tiempo de habitar el paraíso, me dije cuando en el alma crecía tal deseo como un rumor de aves: eran pájaros que no cantaban, batir de alas en desventura. Me acerqué a la luz de la conciencia, no vi nada. Fui entonces a las cavernas interiores ...

 

   Playeras

   Justo Sierra

primeros versos

Baje a la playa la dulce niña, perlas hermosas le buscaré; deje que el agua durmiendo ciña con sus cristales su blanco pie. Venga la niña risueña y pura, el mar su encanto reflejará, y mientras llega la noche oscura, cosas de amores le contará. Cuando en Levante despunte el día ...

 

   Recuerdo que el amor era una blanda furia...

   Eduardo Lizalde

primeros versos

Recuerdo que el amor era una blanda furia no expresable en palabras. Y mismamente recuerdo que el amor era una fiera lentísima: mordía con sus colmillos de azúcar y endulzaba el muñón al desprender el brazo. Eso sí lo recuerdo. Rey de las fieras, jauría de flores carnívoras, ...

 

   Pastoral

   Gabriel Zaid

primeros versos

Una tarde con árboles, callada y encendida. Las cosas su silencio llevan como su esquila. Tienen sombra: la aceptan. Tienen nombre: lo olvidan.

 

   No la amante

   Bernardo Ortiz de Montellano

primeros versos

No la amante, el amor. La singladura de la noche que arrastra fuego frío por las venas del sueño, poderío de la encendida palidez oscura. El amor, no la amante. El goce mío, la imagen que desbasto. La onda pura que invade entre las ruinas mi locura de tallar en diamante lo sombrío. No la amante, ...

 

   El espejo de los enigmas: los monos

   José Emilio Pacheco

primeros versos

Cuando el mono te clava la mirada estremece pensar si no seremos...